Por Manuel R. Ortega

¿Cómo nació el proyecto de Atresmedia Formación?

El proyecto surgió dentro de la reflexión que todas las áreas de la Empresa intentamos hacer para ver cómo podíamos adaptarnos y ver qué podíamos aportar. Nos dimos cuenta de que teníamos un ‘know how’ latente, con personas con amplios conocimientos en comunicación audiovisual y con dos décadas de experiencia en formación interna. Ahí teníamos algo que podíamos “activar”, entre comillas. De ahí surgió la idea de llevar esto fuera, porque tampoco había una oferta informativa muy desarrollada en cursos cortos.

Me explico: cuando la gente salía de su carrera, o de su FP, se encontraban con que sólo podían optar a un máster, con una duración de uno o dos años, caro, etc. o no había manera de tener una formación cercana. Sin embargo, nosotros teníamos los conocimientos, las personas para impartir esa formación y la posibilidad de trocearla para que fuera interesante para la gente. Así es como surgió la idea.

Al principio, nos orientamos a la comunicación audiovisual. Nuestro primer plan de negocio era dirigirnos a las empresas del sector, y de hecho hicimos muchas cosas. Hemos trabajado con Secuoya, con Mediapro, con AMC… Luego también lanzamos los cursos abiertos, porque lo que queríamos era ofrecer unos cursos de 300-400 euros, de una semana de duración, con 16-20horas, impartidos aquí, sin masificación. Nuestro valor añadido era que esos cursos estaban muy centrados en el contenido, muy prácticos e impartidos por personas que trabajan con esas materias en el día a día. Con eso también nos dimos cuenta de que hubo una buena respuesta por parte de esas personas que daban la formación. Ese fue nuestro primer impulso.

Cuando presentamos este proyecto, lo vimos también como un elemento más para la marca ATRESMEDIA, otro atributo que pudiéramos presentar como “no sólo hacemos televisión, sino que también formamos a las nuevas generaciones del medio”.

El catálogo es muy completo y está muy enfocado hacia la práctica. Pero no sólo os dirigís a graduados y estudiantes. ¿Cuáles son vuestras líneas de negocio?

Tenemos varias. Por un lado, están los cursos abiertos, en los que la gente se inscribía y los seguía aquí, presencialmente, y ahora online. De esos, podemos hacer de tres a ocho al mes y a ellos se puede apuntar cualquier persona para aprender sobre locución, elaboración de reportajes con cámara de video, ‘branded content’… Temas muy concretos que suelen durar entre 16 y 20 horas.

En cuanto a la formación nacional al sector, lo tuvimos que ir dejando a un lado en favor de acuerdos con entidades. Por ejemplo, con Cajasol, con la Fundación Araguaney, con universidades, con Comunidades Autónomas como Castilla-La Mancha, donde hemos dado formación a sus profesores de instituto y colegio en temas de comunicación, etc. Con el Servicio Gallego de Salud hemos realizaos unos videos destinados a formar al personal sanitario sobre cómo tratar a personas afectadas por violencia de género. Ahora estamos preparando videos sobre cómo mejorar las habilidades de comunicación de los profesores en sus clases online para la Consejería de Educación de Galicia. Con Novartis, en el Hospital de Zaragoza, contribuimos a enseñar cómo mejorar el trato a los enfermos. En resumen, lo que empezó siendo algo con comunicación audiovisual ha ido enfocándose hacia la comunicación en sí.

También hemos llegado a un acuerdo con el Instituto de Formación Profesional (iFP) de Planeta. Montamos unos ciclos de producción, realización y ‘dj’ en Barcelona y Madrid en los que ponemos la adaptación del plan de estudios a la realidad del día a día, profesores, prácticas…

De la misma forma, contamos con masters de temas audiovisuales que compartimos con la Universidad Antonio de Nebrija y con la Universidad Internacional de Valencia - VIU. Con ésta última ponemos el mismo esquema que con el iFP, aunque sin prácticas al ser online, y con la Nebrija hacemos algo similar.

Nuestro gran salto, que tuvo lugar hace un par de años, se produjo al orientarnos hacia el trabajo con empresas. Vimos que la comunicación es algo transversal y fundamental en cualquier profesión, en cualquier empresa. Por eso empezamos a ofrecer cursos de esta materia a todos los niveles (directivos, técnicos, mando intermedios) a diferentes empresas. Tenemos clientes como Mondragón, Samsung, BBVA, Sanitas, Pfizer, Sanofi, Roche… a pesar de haber tenido que parar por la pandemia.

Igualmente, ahora nos estamos orientando hacia los cursos online para Iberoamérica en el entorno de comunicación.

¿Cómo habéis capeado la pandemia?

Los cursos abiertos los hemos pasado a formato online. Por supuesto, no hacemos todos los que quisiéramos porque al alumnado también le cuesta más. Ten en cuenta que aquí, cuando alguien venía a hacer un curso, podía encontrarse en un pasillo con uno de nuestros presentadores, y eso es algo a valorar, porque para mucha gente esto es un tema aspiracional también. De la misma forma, hemos tenido que parar los cursos para directivos, que eran un ‘top’, en nuestros platós, con caras conocidas de la Casa… Para muchos directivos, un curso de comunicación en Atresmedia ha supuesto una revolución frente al típico curso que se imparte en un hotel. Esto era otra cosa. Pero claro, esa presencialidad ahora mismo es imposible. Y también cuenta que la crisis ha obligado a las empresas a recortar, y lógicamente, lo han hecho en materias como Formación.

De todas formas, nuestra idea es ir impulsando todo poco a poco. En ese sentido, hemos presentado ofertas a clientes como el Banco Santander o Telefónica y estamos a la espera de que todo se reactive.

¿Cualquier empleado puede proponer un curso?

Claro. Tenemos nuestro catálogo pero si alguien nos dice que es experto en algún tema, lo valoramos. Hemos tenido varias ideas de personas que han propuesto cursos. Que salga adelante, depende de que se llegue a un número mínimo de inscritos. Pero nosotros lo ofrecemos en nuestra oferta.

¿Qué planes de futuro tenéis?

Nuestro plan de futuro pasa, lo primero, por impulsar los cursos en abierto. Hasta ahora, hemos conseguido hacernos un nombre y consolidarlo. Pero este mundo de Internet es muy complicado, todo el mundo se quiere posicionar. Por eso tenemos que hacer un esfuerzo de reposicionamiento, de invertir en la página web, de SEO.

Queremos llegar a más gente y crecer en el ámbito digital.

También buscamos el crecimiento entre las empresas. Ya tuvimos una facturación muy interesante en 2019 y contábamos con unas excelentes perspectivas en febrero de 2020, pero con la pandemia se frenó todo. Ahora tenemos que retomar donde lo dejamos, impulsando y convirtiéndonos en un ‘partner’ importante en Comunicación en el ámbito empresarial. La idea es tener unos 20, 30 o 40 clientes que nos encarguen formación cada año.

El tercer impulso son los acuerdos con Planeta. Además de los que mantenemos con iFO y con VIU, han lanzado The Core School, en Tres Cantos, que es un ‘hub’ de producción pero que también será de formación, y ahí vamos a estar nosotros.

Y por último, también de la mano de Planeta, estamos intentando crecer en el mercado internacional. Hemos presentado ya una serie de cursos destinados a una red de universidades iberoamericanas y varias ofertas a empresas para dar formación en comunicación.

Nos has dibujado las líneas maestras del proyecto de Atresmedia Formación. En resumen, Lucio, ¿qué nos aporta?

Nos da rentabilidad, un atributo de marca más para la Compañía y contribuye a dinamizarnos. Atresmedia Formación ofrece la posibilidad de permitirnos salir de la rutina, de motivarnos y de hacer otras cosas distintas a nuestro día y a día a todos los que participamos.