La llegada de Drag Race a Atresmedia fortalece todavía más la idea del grupo de hacerse con los formatos de entretenimiento más potentes del mundo
DRAG RACE, REIVINDICACIÓN EN TACONES
Por Dani Jabonero
¡Hola hola hola!
Fue en febrero del año 2009 cuando el formato ‘Drag Race’ vio la luz en la televisión americana. Por mucho que el fenómeno Drag ya estuviese instaurado en nuestras vidas y en nuestras noches, poco se sabía de las personalidades que se escondías tras ese maquillaje y esas pelucas. Y llegó un programa de televisión que nos mostró la humanidad que hay detrás, sus historias y la vida tan dura a la que han tenido que hacer frente en muchos momentos.
La llegada de Drag Race a Atresmedia fortalece todavía más la idea del grupo de hacerse con los formatos de entretenimiento más potentes del mundo
En el año 2017, justo cuando Donald Trump ganaba las elecciones, el cómico y presentador de televisión John Oliver programó varias entregas de ‘RuPaul’s Drag Race’ en la cadena. Era la televisión en la que quería vivir, decía, y no la que estaba escribiéndose en los libros de historia en aquel momento. Ha sido una muestra más de lo importante que ha sido este formato para la sociedad (mucho más del mundo LGTBI).
‘Drag Race’ ha sido mucho más que un programa de televisión. Ha sido un formato que ha inculcado una manera de vivir, ha promovido el color y ha lanzado mensajes a la sociedad a través del mundo del entretenimiento. Ha hecho realidad los sueños de decenas de personas y ha unido a familias rotas que no habían tenido una verdadera oportunidad.
Y ahora… esta historia llega a España. ‘Drag Race’ aterriza en ATRESplayer PREMIUM después de haberse convertido en un fenómeno mundial. Eran muchas las voces que pedían la llegada de este formato a nuestro país. La tradición drag dentro de nuestras fronteras es muy potente y parecía extraño que el sueño no se hiciese realidad.
En ‘Drag Race’ la historia parece sencilla: un grupo de 10 participantes pelearán por ser la mejor superestrella drag de España a través de distintos retos que mezclan la moda, la música o la interpretación. Sin embargo, a través de los distintos episodios veremos que sus historias son lo verdaderamente importante de la competición. Y es que el simple hecho de tener la oportunidad de tener un micrófono (y un altavoz) a su disposición para contar su verdad es su gran premio final.
Las drags son en sí mismas reivindicativas. Algunas lo hacen en forma de comedia y otras lo hacen en forma de belleza extrema. Pero siempre hay un mensaje tras el modelo que viste su piel. El simple hecho de maquillarse, salir a la calle y subirse a un escenario es un mensaje importante para la sociedad. Un dardo que muy pocos se atreven a hacer.
La versión americana de ‘Drag Race’ ya lleva 13 temporadas en activo incluso con pandemia de por medio. Y ya se han lanzado a mercados como Canadá, Reino Unido, Holanda o Australia. Las participantes de cada edición saben que es una catapulta al estrellato que tiene un valor incalculable. Y es que las concursantes se convierten en estrellas que hacen giras mundiales y que proclaman sus valores allá por donde van. Una oportunidad de enseñar su arte que no lograrían de otra manera. Es por eso por lo que las concursantes llevan muchísimo tiempo preparándose para entrar en esa competición.
En un mundo que alza la bandera del pájaro de Twitter como la más absoluta verdad, es importante que 10 drags se suban a una pasarela para decir “aquí estoy yo”. Su aparición en su mensaje en sí mismo.
Su llegada a Atresmedia fortalece todavía más la idea del grupo de hacerse con los formatos de entretenimiento más potentes del mundo. ‘La Voz’, ‘Mask Singer’, ‘Pasapalabra’, ‘La ruleta de la Suerte’, ‘Tu cara me suena’… Nombres que se han hecho gigantes en la industria audiovisual y que tienen su casa en España en el grupo Atresmedia.
Buena suerte… y no la caguéis.